miércoles, 4 de febrero de 2009

TIEMPO

Ella se perdia en sus pensamientos como el sol se perdia aquella tarde de febrero. Mirando fijamente al cielo, tal vez esperando una respuesta que sabia que era imposible, se formulaba una y otra vez esa pregunta. Solo necesitaba una cosa, algo tan sencillo pero a la vez imposible. Necesitaba tiempo...
Tiempo, no para ella, no para pensar ni para realizar algo, queria tiempo para regalarle a una persona, pero no a cualquiera. Tiempo para la persona que le brindaba los besos mas dulces, que le hacia olvidar todo con su sola presencia, que la trataba como a una reina los momentos que compartian y la cuidaba como nadie lo habia hecho antes. A él que iluminaba la inmensidad de su mundo con una mirada y tenia el poder de llevarla al cielo con sus manos. Quizas por eso ella estaba mirando el cielo... Queria saber como robar minutos para compartirlos con él, pasar una eternidad en sus brazos sin tener que preocuparse por nada. Solo lo conseguiria si obtenia ese preciado tiempo, nada mas dificil que eso.
No sabia el precio que debia pagar, aunque en su interior lo conocia muy bien, pero estaba dispuesta a pagarlo y era muy alto... Mientras buscaba la forma de apoderarse de una fraccion de tiempo recordaba los increibles momentos (de vidrios empañados) que pasaron juntos y queria repetirlos mil veces mas en la posteridad.
Pero en ese momento se dio cuenta que no deberia buscarlo, porque el destino los habia alejado por un periodo infimo de tiempo... pero eso alcanzo para que cada uno armara su vida y ahora caprichosamente los habia vuelto a cruzar. ¿Con que fines? ¿Porque?
Acaso el destino se divierte viendo como los debiles mortales tratan de manejar el tiempo sin percatarse siquiera que ellos son las verdaderas victimas de este dios tan cruel.
Y mientras las primeras sombras caian ella abandono sus pensamientos y se dispuso a seguir, dejando la intencion de averiguar lo que pasaria.
Para eso esta el destino, dejó en sus manos la decision, no tenia intencion de complicarse por ahora. Y volvio a la casa antes de averiguar si alguien habia atendido su suplica y queria ofrecerle una solucion...

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